¿Qué es un director general y cómo ser uno?

4 min de lectura

Un director general probablemente sea el capital humano más importante de una empresa, ya que de él depende en gran medida la efectividad de los empleados y del negocio mismo.

En este artículo te explicamos los puntos clave de este cargo y cómo puedes llegar a obtener este puesto en una empresa. ¡Sigue leyendo!

¿Qué es un director general?

Primero que todo: ¿qué es un director general?

Un director general, o CEO (Chief Executive Officer) por sus siglas en inglés, es la mayor autoridad dentro de una empresa. De él dependen la toma de decisiones, la dirección que tomará la empresa y la motivación de cada empleado.

Es tan importante hoy en día, que hay carreras especializadas en crear nuevos directores generales. Aunque es obvio que no podemos asegurarte que al salir de la carrera de Dirección de Empresas vayas a tener el puesto más alto de una gran empresa, también es obvio que ayuda muchísimo a crear el perfil indicado para lograrlo.

¿Qué hace un director general?

Ahora bien, lo que hace un director general en una empresa no solo es motivar y tomar decisiones de la entidad. Otra de las actividades más importantes de un director de una empresa es la de coordinar todas las direcciones a su cargo, como pueden ser las de:

  • Finanzas
  • Mercadotecnia
  • Logística
  • Operaciones

En pocas palabras, si realmente quieres llegar a esta posición algún día, tienes que estar dispuesto a llevar esa responsabilidad.

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¿Cómo convertirte en un director general? ¡Sigue estos 5 tips!

Conocer lo que hace un director general no es suficiente, y por lo general te tomará muchos años llegar a tu meta. Para ayudarte, te compartiré estos 5 consejos que te facilitarán el ascenso a la cima.

1. Muévete lateralmente y verticalmente en el organigrama

Como ya dije en párrafos anteriores, es muy raro que una persona llegue de buenas a primeras a un puesto de director general.

Normalmente, se elige a un director general por su trayectoria en la misma empresa o en otras empresas. Por lo tanto, te recomiendo que si estás buscando una posición alta en tu empresa, inviertas tiempo ahí, es decir, que trabajes y crezcas de manera orgánica.

Por ejemplo, supongamos que entras a trabajar en una empresa transnacional en el departamento de mercadotecnia. Ese departamento se divide a su vez en otras secciones como publicidad, relaciones públicas e imagen corporativa.

Tú podrías estar en el área de publicidad y dar excelentes resultados, y con el tiempo es posible que te muevan a otras divisiones como la de relaciones públicas y también dar buenos resultados. De esta manera los jefes observarán que eres una persona con capacidad y que entiende cómo funcionan varias partes de la empresa.

Mientras más tiempo pases en la misma compañía, aprendiendo cada una de sus partes y demostrando que eres capaz de hacer un trabajo excepcional, tendrás más posibilidades de conseguir un puesto de gerente.

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2. Estudia una carrera enfocada en alta dirección

Este es uno de los puntos principales para poder aspirar a ser un director general: estudiar una carrera en Administración de Empresas, alta dirección o similares, te ayudará muchísimo a llegar a tu objetivo.

Lo bueno de estudiar una carrera como Dirección de Empresas, es que aprenderás de todos los temas relacionados con el correcto funcionamiento de una compañía.

En pocas palabras, no solo verás finanzas o contabilidad, sino que también aprenderás sobre mercadotecnia, gestión de recursos, producción y optimización de procesos; cosas que a primera podrías pensar que tienen más relación con una carrera como Ingeniería Industrial.

Pero no solo tendrás los conocimientos necesarios para desempeñarte como un director general competente y exitoso, sino que también tendrás relación con personas que buscan lo mismo que tú o  que ya tienen esos puestos, los cuales te podrán guiar y dar consejos para alcanzar tu meta.

3. Trabaja para los jefes de otras direcciones

Este punto tiene mucho que ver con el primer consejo, pero la diferencia es que en vez de enfocarte en moverte por todo el organigrama, busques continuamente oportunidades para trabajar directamente con los jefes de las distintas direcciones.

No es lo mismo trabajar para un área, que trabajar con el director de esa área, por la simple razón de que nadie podrá enseñarte más que el líder del departamento.

El conocimiento que te dará será oro puro, ya que él o ella conoce bien el funcionamiento de la empresa y sabe cómo crecer dentro de la empresa, además de todo el conocimiento técnico que te puede dar.

4. Demuestra tu productividad

Si quieres que tus jefes te vean o que los dueños de la empresa te consideren para un puesto de gerente general, tienes que ser el número uno en lo que hagas y demostrarlo todo el tiempo.

Ojo, no te estoy diciendo que te vuelvas una persona presumida o prepotente. Lo que te digo es que demuestres tu productividad con hechos y buena actitud.

Una recomendación que te puedo dar es siempre tener actitud de servicio. Es decir, además de ser una persona servicial, también sé el empleado con las mejores virtudes, el más puntual y el más proactivo. En pocas palabras, ponte la camiseta de la empresa.

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5. Considera estudiar un MBA

Master in Business Administration (MBA), o en español Maestría en Administración de Negocios, es la maestría especializada en saber, como su nombre lo dice, administrar un negocio de principio a fin.

Obviamente, primero tienes que estudiar una carrera si quieres obtener una de estas certificaciones, pero si lo haces, es importantísimo que después de la licenciatura vayas por una maestría.

La mayoría de los candidatos que aplican para una posición alta, tienen un perfil administrativo y una licenciatura. Si tú eres de los pocos que cuenta con una maestría, resaltarás inmediatamente sobre el resto.

Por supuesto, cabe destacar que, aunque lo mejor es estudiar un MBA, también hay otros cursos o diplomados que te ayudarán a crecer dentro de la empresa y a tener mejores oportunidades de empleo.

¡Invierte en tu educación!

Nunca dudes en invertir en tu educación. Tus conocimientos y aptitudes son tus activos más importantes.

Como te darás cuenta, no hay atajos para llegar a una de estas posiciones. Si realmente quieres estar en lo más alto, tienes que trabajar como tal. Nadie te regalará nada, pero eso está bien. ¡Hará que sea más satisfactorio conseguir tu meta!

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Escrito por Ana Romero

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